El tejado es una de las partes más importantes de cualquier vivienda o edificio, ya que protege la estructura de las inclemencias del tiempo y garantiza la seguridad en el interior. Sin embargo, con el paso del tiempo, los tejados pueden sufrir daños que, si no se detectan a tiempo, pueden derivar en problemas más graves como filtraciones, humedades o incluso fallos estructurales.
En Tejados del Norte, sabemos lo frustrante que puede ser enfrentarse a un tejado en mal estado. Por eso, queremos ayudarte a identificar las principales causas de daños en los tejados y, lo más importante, cómo prevenirlas. Con unos simples cuidados y revisiones periódicas, es posible alargar la vida útil de cualquier tejado y evitar costosas reparaciones en el futuro.
En este artículo, te explicaremos qué factores pueden afectar a tu tejado y qué medidas puedes tomar para mantenerlo siempre en las mejores condiciones. ¡Vamos a ello!

Principales causas de daños en los tejados
Los tejados están constantemente expuestos a factores que pueden debilitarlos con el tiempo, afectando su resistencia y funcionalidad. Si no se detectan a tiempo, estos daños pueden derivar en problemas estructurales, filtraciones o incluso el colapso de la cubierta. A continuación, exploramos las principales causas de deterioro en los tejados.
1. Factores climáticos y ambientales
Las condiciones meteorológicas son una de las principales causas de daños en los tejados. La exposición prolongada a la lluvia, el viento, el sol o el frío puede deteriorar los materiales con el paso del tiempo.
- Lluvia y humedad: El agua es uno de los enemigos más peligrosos de un tejado. Con el tiempo, la humedad puede filtrarse a través de pequeñas grietas, generando goteras y debilitando la estructura de la cubierta.
- Viento fuerte: Las ráfagas de viento pueden desplazar tejas o incluso arrancarlas, dejando el tejado expuesto a otros factores como la lluvia y la suciedad.
- Radiación solar: La exposición constante al sol hace que los materiales se expandan y contraigan, provocando fisuras y reduciendo su vida útil.
- Nieve y hielo: En climas fríos, la acumulación de nieve puede ejercer un peso excesivo sobre la estructura del tejado, aumentando el riesgo de deformaciones o hundimientos.
2. Falta de mantenimiento y desgaste natural
El paso del tiempo y la falta de revisiones periódicas contribuyen al deterioro progresivo de los tejados.
- Suciedad acumulada: La acumulación de hojas, ramas y residuos puede obstruir los canalones, impidiendo el drenaje del agua y favoreciendo filtraciones.
- Desgaste de materiales: Con el tiempo, los materiales del tejado pierden su resistencia, especialmente si están expuestos a condiciones climáticas extremas.
- Canalones y bajantes en mal estado: Un sistema de drenaje defectuoso puede provocar acumulaciones de agua que terminan filtrándose en la estructura del tejado.
3. Defectos en la instalación y materiales de baja calidad
Un tejado mal instalado o construido con materiales poco resistentes tiene una vida útil mucho más corta.
- Colocación incorrecta de tejas: Si no están bien fijadas, pueden desplazarse o romperse con facilidad.
- Materiales de baja calidad: Algunas cubiertas no resisten bien la exposición prolongada a la intemperie, desgastándose antes de lo previsto.
- Errores en la impermeabilización: Si el sellado no se ha realizado correctamente, es más probable que aparezcan filtraciones con el tiempo.
4. Vegetación y plagas
El crecimiento de musgo, moho o raíces sobre el tejado puede debilitar los materiales y aumentar el riesgo de humedad. Además, algunos animales, como aves y roedores, pueden anidar en las cubiertas, dañando tejas y estructuras de soporte.
Todas estas causas afectan la integridad del tejado y pueden generar problemas graves si no se detectan a tiempo. En la siguiente sección, exploraremos cómo prevenir estos daños para alargar la vida útil del tejado y evitar costosas reparaciones.

Cómo prevenir los daños en los tejados
Los tejados están expuestos a numerosos factores que pueden deteriorarlos con el tiempo. Sin embargo, con una serie de medidas preventivas, es posible minimizar los daños, alargar su vida útil y evitar reparaciones costosas. A continuación, te explicamos las mejores prácticas para mantener un tejado en óptimas condiciones.
1. Mantenimiento periódico
Uno de los errores más comunes es olvidar que los tejados requieren un mantenimiento regular. Es recomendable realizar inspecciones visuales al menos dos veces al año, especialmente después de temporadas de lluvias o fuertes vientos. Durante estas revisiones, se deben identificar tejas sueltas, grietas o acumulaciones de suciedad que puedan afectar la estructura.
2. Limpieza de canalones y desagües
Los canalones cumplen una función clave en el drenaje del agua de lluvia. Si se obstruyen con hojas, ramas o suciedad, el agua puede acumularse y filtrarse en la estructura del tejado. Limpiar los canalones y bajantes con regularidad evitará que el agua cause humedades o filtraciones en la vivienda.
3. Uso de materiales de calidad
Al momento de instalar o reparar un tejado, es fundamental optar por materiales resistentes y duraderos. Las tejas, impermeabilizantes y aislantes deben ser adecuados para las condiciones climáticas de la zona, evitando soluciones baratas que pueden deteriorarse rápidamente.
4. Impermeabilización y aislamiento
Un buen sistema de impermeabilización evita filtraciones de agua, mientras que un aislamiento térmico adecuado protege la vivienda de cambios de temperatura y mejora la eficiencia energética. Reforzar estos aspectos en el tejado prolongará su durabilidad y reducirá problemas a largo plazo.
5. Control de vegetación y plagas
El crecimiento de musgo y moho puede afectar la estructura del tejado. Aplicar productos específicos y mantener la superficie libre de humedad reducirá la aparición de microorganismos dañinos. Además, es importante revisar que no haya nidos de aves o roedores que puedan dañar las cubiertas.
Los tejados requieren atención y mantenimiento para conservarse en buen estado. Factores como el clima, la acumulación de suciedad, el desgaste natural o una instalación deficiente pueden afectar su integridad. Sin embargo, con inspecciones periódicas, limpieza adecuada, materiales de calidad y una buena impermeabilización, es posible prevenir la mayoría de los daños y prolongar su vida útil.
En Tejados del Norte, sabemos lo importante que es contar con un tejado seguro y bien mantenido. Si necesitas una inspección, mantenimiento o reparación en Ourense, estamos aquí para ayudarte. ¡Protege tu tejado y evita problemas futuros! 🚀
644 03 17 08
Pide tu presupuesto sin ningún compromiso